viernes, 8 de marzo de 2013

El oso "marciano" de la NASA

El tardígrado es capaz de soportar ambientes extremos gracias a la regeneración de su ADN



Esta criatura podría ser el perfecto candidato para ser extraterrestre gracias a su enorme capacidad de soportar ambientes extremos. Pero no lo es. Vive entre nosotros y se le conoce como el oso de agua o tardígrado. 

Los tardígrados son invertebrados microscópicos que miden entre 0,05 y  1,5 milímetros.  Se conocen como osos de agua por su aspecto ‘achuchable’ y su manera de moverse. Cuentan con ocho patas y se desplazan muy lentamente. Viven en el agua o en zonas húmedas, cerca de  musgos o helechos. Los científicos calculan que hay más de 1.000 especies de tardígrados en todo el mundo.

Su característica más llamativa son su resistencia a los ambientes más extremos. La NASA cuenta que son capaces de sobrevivir durante décadas sin comida ni agua y resisten climas a las temperaturas a las que hierve el agua y a temperaturas bajo cero. ¿Su truco? Son capaces de reparar su propio ADN y reducir su contenido de agua.

Aprovechando su capacidad para aguantar niveles muy altos de radiación, los científicos los usan para investigaciones espaciales. Los osos de agua viajaron a bordo de la nave espacial rusa no tripulada Fobos-Grunt con destino a la luna marciana Fobos, pero un fallo técnico echó al traste la misión e impidió comprobar si estas criaturas eran capaces de sobrevivir al inhóspito ambiente del sistema planetario. Si lo hicieron en 2011, cuando se usaron en un experimento realizado en un transbordador de la NASA en el que colocaron al animal en el exterior de vehículo espacial y sobrevivió.